Durante protesta multitudinarias, más de 700 personas fueron detenidas en Bielorrusia por manifestarse en contra la reelección del presidente en turno.
Un total de 713 personas fueron detenidas por realizar marchas en todo el país y 570 permanecen arrestadas a la espera de una audiencia ante el juez, informó el Ministerio del Interior.
De ser “necesario”, el ministerio amago con usar armas de fuego en contra de los manifestantes y acusó de que las marchas se volvieron extremadamente “radicales”.
La razón de las protestas es el exigir la renuncia del presidente Alexander Lukashenko, quien lleva 26 años en el poder. Las manifestaciones abarcaron varias ciudades, con grandes multitudes en la capital.
Organismos internacionales calcularon que al menos 100 mil personas participaron en la última marcha.
Las autoridades policiacas dispersaron la protesta con cañones de agua, granadas aturdidoras y porras, por lo que impidió que grupos provenientes de otras ciudades se sumaran a la manifestación.